Rechazan docentes de Jojutla fusión de grupos:



HUGO BARBERI RICO

JOJUTLA, MOR. Profesores de este municipio rechazaron la fusión de grupos que se pretende realizar en las principales escuelas de la cabecera municipal, lo cual es considerado como antipedagógico y una embestida oficial en contra del gremio.
Sandra Soraya Santana Salgado, secretaria Coordinadora de la región Jojutla del Sindicato de Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), denunció que dicha fusión de grupos en las escuelas perjudicará las plazas de ocho profesores en las primarias Gabriel Tepepa, Rafael Ramírez y Adolfo López Mateos, del municipio de Tlaquiltenango.
Aseveró que la semana pasada, el Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), hizo llegar algunos documentos en los cuales ordena a directores de escuelas fusionar grupos de alumnos, “lo cual traería consecuencias graves en lo que respecta a elevar la calidad educativa”.
Es de considerarse, añadió, el clima caluroso de la región, uno de los principales factores que incomodaría y causaría problemas en la realización de salones con más alumnos; “se crearían salones con muchísimos alumnos y no se darían la condiciones para una educación especializada.”
Como sindicato “tenemos instrucciones precisas de la dirigencia estatal para enfrentar esta situación, es decir, defender a sus compañeros si no les dan un fundamento necesario cuando los quieran destituir”.
En datos adicionales, Santana Salgado informó que hay 223 escuelas de preescolar, primaria, secundaria y nivel superior, con un total de tres mil 422 profesores y 105 mil alumnos.
Señaló que la acometida del gobierno “más que contra el sindicato es contra la educación”, pues continuamente escuchan en comerciales que el gobierno está preocupado por la calidad educativa, pero toma medidas contradictorias que afectan la enseñanza.
En este sentido, manifestó que para dar una enseñanza de calidad, debe haber como máximo, 25 alumnos por salón, sin embargo, señaló que hay escuelas que tienen hasta 50 niños por aula.
Es un problema difícil para el magisterio que tiende a empeorar, “estamos esperando contar con la estadística de inscripción inicial, para poder entablar las pláticas correspondientes con las autoridades, tanto con supervisores escolares” como con otras autoridades.