jueves, diciembre 30, 2004

Se retiran algunos artesanos de la feria de Jojutla por arbitrariedades:

HUGO BARBERI RICO
JOJUTLA, MOR.

Tras cinco días de crisis en la tradicional Feria de Jojutla, ante denuncias contra los excesos del comité que preside Esther Morales Casildo, en donde el ayuntamiento de este lugar no ha podido conciliar ni solucionar el problema, finalmente se fueron a su lugar de origen algunos artesanos.La tensión se recrudeció con la presencia policíaca desde el 23 de diciembre pasado con el establecimiento de los vendedores, la intervención de tránsito y el rompimiento de diálogos con las autoridades municipales. Anteayer por la tarde se reunirían representantes del ayuntamiento, del comité de la feria y los artesanos afectados para buscar una solución al conflicto, sin embargo, todo se complicó.Luego de cierres parciales y periódicos a la calle Francisco Javier Mina, de constantes señalamientos y descalificaciones entre autoridades municipales y artesanos, hubo un intento de solución en el que presumiblemente se reubicarían a seis vendedores, principales afectados por el comité de feria que vendió sus espacios a comerciantes de Jojutla, según la denuncia de los mismos afectados.La protesta de los artesanos fue que Esther Morales dijo que el comité de padres de familia del jardín de niños Leona Vicario le pidieron no dejara que se instalaran los vendedores en la entrada de la institución, que por tradición lo hacen año con año. Trabajadores de barro, talavera, cerámica, productores de pan, churros, etc., provenientes de Michoacán, Guanajuato, Tlaxcala y Texcoco, se encontraron con la novedad de que les habían reducido sus lugares para que los ocuparan tianguistas de los mercados de Jojutla.En su tierra lo que quieranLa postura del comité de feria es tajante. En entrevista, el líder de la feria, Raúl Rangel Rodríguez, asentó: “…no están en su tierra, ahí que hagan y dispongan”, y los invitó a la reflexión para que acepten la reubicación en donde los quieren poner.Los vendedores inconformes repudiaron el trato que les han dado en esta ocasión, aclarando que es la primera vez en que son maltratados, marginados por los mismos integrantes del comité y de las autoridades municipales, razón por la que finalmente abandonaron la feria tres artesanos luego de cinco días de pérdidas y gastos que superaron, en algunos casos, los 18 mil pesos.Alrededor de 40 artesanos se manifestaron cerrando la calle Mina e instalaron pancartas de protesta principalmente contra Esther Morales. Ayer por la tarde, luego de un diálogo que sostuvieron con el presidente Nelson Torres Mondragón, se dijo que había un acuerdo para la reinstalación de seis afectados, sin embargo, alrededor de las 17 horas ante la presencia del nuevo director de licencias y reglamentos, Roque Pérez Tarango, del subsecretario de gobierno municipal, Cesar Bahena Valle, integrantes del comité de feria y del patronato del evento, también se hizo presente el notario público número uno de Jojutla, Juan José Hernández Ramírez, al no realizarse el acuerdo entre ayuntamiento y disidentes.Denunciaron la concentración del poder en manos de los líderes Rangel y Morales Casildo en el sentido de que han colocado arbitrariamente a tianguistas en puestos de artesanos, tal es el caso de una familiar de Rangel quien renta el lugar y se instala los últimos días de la feria, así como otro pariente de Rangel que vende cerveza; en ambos lugares quitaron a comerciantes de pan de Tlaxcala.La misma Esther Morales incrementó su puesto de bicicletas de cuatro a 12 metros en la calle principal y más cotizada de la feria, instalando también a un familiar a unos metros de su puesto, mismo que incrementó de cuatro a ocho metros, con lo que quitó a vendedores de pan de tradición de Tlaxcala y Texcoco.

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