Línea Directa
* Guillermo del Valle: Maricela Sánchez

Luis Manuel Vargas Pérez

La figura de Guillermo del Valle antes de Maricela Sánchez Cortés, prácticamente era inexistente. Sin embargo, a raíz de la oportunidad otorgada por la nativa de Puebla, es que el ahora diputado federal ha logrado escalar de manera vertiginosa escaños que estaban destinados a los cuadros de larga militancia priísta, y a los cuales algunos no podían llegar luego de décadas y décadas de lucha.
Sin embargo para Del Valle fue necesario solamente que se le abrieran las puertas y de manera personal logró conquistar importantes bastiones políticos de la región oriente que le llevó a conquistar, únicas conquistas en su vida política, una diputación local y ahora una diputación federal.
Y ellas han sido su carta de presentación ante la militancia priísta, el haber derrotado, en los años de mayor crisis política, tanto a la fuerza panista y a la perredista, y la cual fue su carta de presentación ante los cientos y cientos de priístas que se presentaron a escuchar las propuestas políticas el pasado miércoles en el restaurante Villa Béjar.
Y ante estas cartas de presentación, simplemente, nada pudieron alegar ni decir los candidatos a la presidencia estatal del PRI, como fue el caso de Jorge Arturo García Rubí y Francisco Moreno Merino, quienes de plano no han participado en elección constitucional alguna que les hubiera permitido presumir algún triunfo sobre las fuerzas electorales tanto del PRD como del PAN.
Y el hecho de haber llenado el auditorio con simpatizantes propios, hizo que la fiesta fuera prácticamente a favor de Del Valle, quien de esa forma, además del respaldo obtenido en las diferentes regiones de la entidad, le hacen suponer un triunfo contundente sobre sus adversarios más cercanos, como el caso del ex gobernador García Rubí y del ex delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Francisco Moreno Merino.

* El hada madrina de Memo del Valle

Quien prácticamente le rescata del anonimato y le hace brillar en la vida pública al actual dirigente de la CNOP y diputado federal, ambas responsabilidades con licencia temporal, Guillermo del Valle Reyes, es precisamente a la ahora ex dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Maricela Sánchez Cortés, aquella que a su arribo de su reinado prometía terminar con el cacicazgo político, y que al final de cuentas convirtió al priísmo en un bastión de manera personal.
Y es que fuera del sector campesino que antes del 2000 representaba la principal fuerza política del estado y el país, hoy pasa a conformar la segunda, o quizá la tercera fuerza electoral, por lo que su influencia político-electoral se ha diluido de manera dramática, luego de que la mayor parte de la población rural ha decidido migrar hacia los Estados Unidos, ante la falta de oportunidades en sus comunidades, así como en sus propios estados natales, como en cualquier otra parte del país.
Y es precisamente esa fuerza política a la que continúa apostando Guillermo del Valle, quien si bien cuenta con la simpatía de los sectores políticos de origen, su candidatura se ve empañada por la imagen de Maricela Sánchez Cortés, quien contradictoriamente le ha hecho crecer políticamente, pero que ahora le empaña su imagen política ante las barbaridades cometidas en sus acciones, a tal grado que el único sector en la que podría recibir apoyo Del Valle es en la de extrama pobreza, producto de la compra de votos de Maricela Sánche Cortés, en cambio si busca el electorado de la clase media o alta, incluso de la intelectual, pues difícilmente podrá obtener un solo voto ante la barbarie que siempre enarboló como bandera política Sánchez Cortés, por tal motivo la zona urbana continúa bajo la simpatía del Partido Acción Nacional o bien del Partido de la Revolución Democrática (PAN o PRD, respectivamente).
Sin embargo, difícilmente, podrá el PRI obtener el respaldo en la clase media alta o alta, ante la barbarie que sembró Sánchez Cortés, también conocida como la sembradora de la muerte, pues se le han atribuido los fallecimientos ocurridos en la región oriente, luego del bloque –sin razón- en la autopista Miguel Alemán, que obligó a muchos a transitar por el lado de Xochimilco, o bien los actos de barbarie ocurridos –y que decantaron en homicidios- tanto en Tlalnepantla y Yautepec, donde queda de manera evidente la presencia de Maricela Sánchez Cortés, bajo la cortina de perseguir, supuestamente, beneficios políticos para la clase necesitada, pero que para los habitantes de ambos municipios, queda claro que fue con base en los beneficios políticos de cierta clase social. Y si no habrá que esperar los resultados finales de las investigaciones judiciales que se llevan en cada uno de los casos.