Repaso
PRI: balcanización

Repaso

Hoy el PRI Morelos realizará su reunión de Consejo Político Estatal. Nada bueno auguramos, porque los candidatos opositores a Guillermo del Valle Reyes temen que allí se carguen los dados a favor del cuautlense. La atomización del priísmo estatal está a la vista, pero también el riesgo de los enfrentamientos violentos, porque en el recinto donde sesionen, adentro estarán los consejeros y afuera un numeroso contingente que estará atento a cualquier chicanada.

Vientos de fronda anuncian turbulencias impredecibles durante la sesión del Consejo Político Estatal del PRI, que tendrá efecto hoy sábado en el Teatro de la Ciudad.La disputa por la presidenciadel partido es la causa. Como hemos comentado, el argumento de la unidad priísta es una falacia. La balcanización de ese organismo político en Morelos es una lamentable realidad para la militancia y para los ciudadanos que todavía manifiestan simpatía hacia el tricolor, ante la jauría en que están convertidos los grupos en pugna.
Si los odios unen, la que hoy sucederá es la protesta en contra de la actual dirigente, Maricela Sánchez Cortés y su evidente inclinación por colocar en su lugar a Guillermo del Valle Reyes, lo que de algún modo, si las cosas les salen como lo tienen pensado, pondría en situación privilegiada a Sánchez Cortés para que a su vez se hiciera de la candidatura para la gubernatura estatal. Eso está en juego y es mucho.
La acusación que los otros candidatos hicieron pública es que la integración del Consejo Político Estatal fue amañada, sin respeto a los estatutos. Observan, por lo tanto, varios riesgos para ellos y para el proceso de elección que debería estar sustentado en la legitimidad democrática. Implícitamente exigen el aplazamiento de esa reunión, porque de otra manera los costos que provoque todo intento de imposición o sesgos, agrietarán aún más la supuesta cohesión con la que pretenden llegar a las elecciones del 2006.
En las inmediaciones del Teatro de la Ciudad se anuncia una concentración de priístas simpatizantes de Manuel Martínez Garrigós, Víctor Rubio Herrera, Francisco Moreno Merino y Mario Luis Salgado Salgado, para impedir un albazo a favor de Guillermo del Valle. Recuérdese que es ese órgano partidista el que determina las características que debe reunir el proceso de selección, a saber, por Consejo Político Estatal, por asamblea general o por consulta directa.
¿Qué podría desencadenar las reacciones violentas de los opositores a Maricela y a Guillermo? Que hoy los consejeros decidan que el proceso sea por Consejo Político Estatal, posibilidad que sólo cobraría fuerza si ambos personajes ya le midieron el agua a los camotes y avizoran que si los grupos contra los que contenderían integran un solo bloque. Se les iría de las manos todos los ambiciosos proyectos que ya guardan en la talega.
Si, por lo contrario, ratifican en sus acuerdos que el proceso será por elecciones abiertas, nada podrán cuestionar a Maricela y a Guillermo, porque si el relevo se define en las urnas, allí ganará el que más capacidad tenga para acarrear incondicionales o para convencerlos de su propuesta.
Por lo pronto, el área cercana al Teatro de la Ciudad será un caos, porque en el interior de ese histórico edificio estarán cerca de 600 consejeros y afuera se calcula que estén cerca de mil personas invitadas por los candidatos recelosos. En un clima de encono, podrían incluso tronar el Consejo de manera violenta. Los augurios, como se aprecia, nada tienen de halagüeños. Si tal escenario de enfrentamiento se confirma, el Partido Revolucionario Institucional desbancará al PRD del pedestal en el que se le ubica como propenso a la violencia y a la anarquía.
Maricela Sánchez Cortés debe medir las consecuencias, de obstinarse en manipular la sucesión. Y sus adversarios ponderar las repercusiones de una confrontación radicalizada. Se darían la puntilla para constituirse en alternativa rentable para recuperar el gobierno que se les fue, precisamente, por sus abusos en la conducción política y su descarnada exclusión de los otros que piensan distinto.

De refilón

¿Y el delegado del CEN del PRI? El veracruzano Flavino Ríos demostrará hoy si sólo vino a cumplir funciones de ornamento, si llegó para validar un proceso viciado o si en verdad lo mandaron para acá con el propósito de mediar entre los múltiples interesados en ocupar la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI. No la tiene fácil.