Los Cañeros y los árbitros :


Desde luego que son dos entes distintos, porque mientras que en los Cañeros del Zacatepec las diversas controversias que se presentan se buscan solucionar de inmediato dando la cara, en el otro punto da la impresión de que se dejan para después, como en el caso de Gilberto Alcalá Pineda, quien sabe y lo entiende que ya no tiene ninguna posibilidad de ir a ninguna justa de alto rendimiento y que terminará, como bien lo dijo uno de sus compañeros, que no le queda más que ser un sacapartidos de cierto grado de dificultad, dado que es confiable, no se atreve a hablar sobre lo que sucede en las entrañas, pero no fue necesario que dijera más que algunas cosas se obtienen fuera de la cancha para que Felipe Ramos Rizo le respondiera que si fue al Mundial y a los Juegos Olímpicos se debió a su trabajo en el terreno de juego, y que el morelense tuvo su oportunidad y no la aprovechó.Si Gilberto sabe algo más, ahora, cuando se corren riesgos, en mi concepto, es cuando tiene valor, no cuando esté al margen, a toro pasado, porque entonces lo único que dejará será el escándalo que no tendrá el mismo efecto y que no logrará nada, porque sencillamente le dirán que está dolido y con eso es suficiente.Si tiene conocimiento de algo que no saben los aficionados, es el momento de hablarlo, de ventilarlo, con el sano propósito de sanear lo que haya que sanear y abrir brecha para no haya más injusticias que, a mi modo de ver, las hay.