sábado, marzo 26, 2005

Revelan ruta del narco a Morelos , de Colombia a Tlaquiltenango


De Colombia a Chiapas o Cuernavaca pasando por Tlaquiltenango, el sistema de entrega de droga que operó aquí el cártel de Juárez, con la protección de la red de policías que encabezaban el ex comandante José Agustín Montiel López y Raúl Cortés Galindo El Mico , tenía como centro de operación el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Uno de los restaurantes de la terminal aérea, El Barón Rojo, sirvió como punto para el pago de droga envuelta e identificada con sellos de alacranes, pescados y estrellas; era entregada en Los Reyes La Paz, estado de México, en vehículos o hasta en departamentos en Tlatelolco.
Al menos 10 declaraciones de testigos contenidas en el expediente del caso Morelos, y a las cuales tuvo acceso Radioreportaje, revelan cómo durante casi dos años operó la estructura de transporte y distribución de droga de Colombia a México en su conexión específica con Morelos.
Las declaraciones de ex agentes ministeriales como Jaime Sánchez Escobar (ex chofer del comandante Montiel López) y Ezequiel Vital Barrera, así como de testigos protegidos de la PGR "Rodrigo" y "Beatriz", entre otros testimonios, explican cómo se efectuaban las operaciones de trasiego de drogas, de acuerdo con las versiones de éstos que están contenidas en el expediente 24/2004 del Juzgado Segundo de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales del estado de México.
El llamado caso Morelos se descubrió aquí hace un año, cuando los ex jefes policiacos Agustín Montiel López y Raúl Cortés fueron detenidos por la PGR bajo la acusación de vender protección a narcotraficantes.
El asunto causó además la mayor crisis política del gobierno de Sergio Estrada Cajigal y la caída de los entonces procurador de Justicia y secretario de Gobierno, Antonio Tenorio y Eduardo Becerra, respectivamente.
Jaime Sánchez Escobar, quien fue escolta del comandante José Agustín Montiel López, aseguró en sus declaraciones que El Mico Raúl Cortés le mostró en varias ocasiones, tanto en la oficina como en la casa de Montiel, diversas cantidades de droga y fajos de dinero.
Provenían, dijo Sánchez, de asuntos o trabajos vinculados con las llamadas "tienditas" o puntos de venta de droga que tenía bajo su encargo quien fuera director operativo de la Policía Ministerial.
"El ex jefe policiaco recibía dicho estupefaciente y dinero por dejar trabajar las `tienditas`. Ello era por instrucción directa del coordinador general, Agustín Montiel López", agregó en su declaración el ex chofer y cuyo testimonio fue uno de los que mayor impacto tuvo para proceder penalmente contra los ex jefes policiacos.
Sánchez Escobar aseguró que regularmente el comandante Montiel ordenaba al agente Saúl Salvatierra llevar droga a la ciudad de México, donde la entregaba a un sujeto conocido como El Coreano en una de las entradas del edificio número 10 de la unidad habitacional de Tlatelolco, cuyo domicilio se ubica en la calle Manuel González casi esquina con Insurgentes.
Otro de los testimonios que el juez encargado del caso Morelos ha valorado es el del ex policía Idelfonso Ortiz Alatorre, quien precisó que "se enteró que en alguna ocasión se autorizó un operativo en el que el ex comandante Luis Alain Pano acudió al poblado de Huacahuaxco, Morelos, y detuvieron un cargamento de ocho kilos de cocaína. Se detuvo a un grupo de narcomenudistas, pero Pano les pidió 400 mil pesos para dejarlos libres".
En tanto, según Ortiz Alatorre, Raúl Cortes El Mico ejecutaba trabajos relacionados con el robo de cargamento de droga y extorsión contra los detenidos.
De esta manera, según el testigo, se extorsionaba a los narcomenudistas y a quienes transportaban drogas, con el fin de no ponerlos a disposición del MP.
Incluso, precisó que en el mes de abril de 2001 se detuvo en la carretera Acapulco-México, a la altura del poblado de Alpuyeca, a un vehículo tripulado por dos sujetos que traían consigo cuatro kilos de cocaína. El comandante Montiel López ordenó que se repartieran dos kilos de ese producto a Nancy Jiménez para hacer grapas .
Los otros dos kilos se enviaron por medio de Saúl Salvatierra a la ciudad de México, para ser entregados a una persona de apodo El Coreano , lo cual coincide con el testimonio del chofer de Montiel López.
Cuando llegaban las avionetas procedentes de Colombia, el comandante Montiel ordenaba a toda la corporación realizar operativos de patrullaje "preventivos" por el centro de Cuernavaca sin detener a nadie. "La intención era que la sociedad se percatara de que la Policía Ministerial estaba alerta. Las unidades viajaban en convoy con las sirenas encendidas y los códigos. Los operativos ordenados por Montiel se daban por las noches, cada ocho días, y coincidía con la llegada de ciertas avionetas al aeropuerto", dijo Ortiz Alatorre.
La versión coincidió con las declaraciones de los testigos protegidos de la PGR "Beatriz" (quien actualmente está desaparecida) y "Rodrigo", así como con la del agente ministerial Marco Enrique Yépez Uribe El Jarocho , quien abundó que la droga que llegaba al aeropuerto de Cuernavaca pertenecía a Vicente Carrillo El Ingeniero , cuyos cargamentos se trasladaban a diferentes depósitos.
Los citados depósitos se encontraban ubicados en lugares como un rancho en Tetecalita y en una casa de Acatlipa, municipio de Temixco, Morelos, así como en un casa en la colonia Las Águilas, de Cuernavaca. El almacenamiento de droga también se efectuaba a un rancho de Guerrero.
De acuerdo con el testimonio de la testigo protegido "Beatriz", Montiel López y Raúl Cortés eligieron como principal centro de recepción de drogas el aeropuerto de Cuernavaca, aunque también en las pistas de Xochitepec y Tlaquiltenango, al sur de Morelos. Ahí bajaban droga las avionetas procedentes de Colombia.
En otras ocasiones, según "Beatriz", los cargamentos también eran traídos del estado de Chiapas por medio de autos del año en los que se trasladaban 30 kilos de cocaína para ser distribuidos en los estados de Morelos, México y el Distrito Federal.

No hay comentarios.: