Lago de Tequesquitengo, destino ideal de aventura

Uno de los destinos más tradicionales en la zona sur del estado de Morelos es sin duda el lago de Tequesquitengo, la extensión de agua más grande en la entidad y un lugar en donde se pueden practicar toda clase de actividades acuáticas, paracaidismo y deportes extremos, que lo convierte en un destino ideal para un fin de semana.Localizado a 45 minutos de Cuernavaca y a menos de hora y media de la ciudad de México, por la autopista del Sol, hay que desviarse en la caseta de Alpuyeca con dirección a Jojutla y a la zona de los balnearios; también se puede llegar por la carretera federal México-Acapulco, tomando la desviación correspondiente en Alpuyeca. Justo saliendo de la caseta se encuentra un módulo de información en donde se proporcionan a los turistas toda clase de folletos acerca de los principales destinos en la zona. El personal que atiende pertenece a la Asociación de parques acuáticos y balnearios de Morelos.Originalmente, Tequesquitengo era un pequeño poblado morelense dedicado a la producción de tequesquite, material utilizado en la producción de jabón; localizado en una cuenca cerrada, recibía las aguas derivadas del riego de la hacienda de San José Vista Hermosa, que al crecer formaron lo que hoy es el lago, que mide más de 4 kilómetros en su parte más ancha.El principal cuerpo de agua en el estado se encuentra en el municipio de Puente de Ixtla, en terrenos de la hacienda Vista Hermosa. El pueblo se encuentra en su ribera oriental, a una altura de 952 metros sobre el nivel del mar. Es la única cuenca cerrada del estado, que se ha ido llenando paulatinamente con las lluvias y sobrantes de los riegos de la hacienda mencionada. Su contorno recuerda la forma de un corazón, con su eje mayor de 4600 metros y el menor de 2700.La tradición cuenta que el antiguo pueblo de Tequesquitengo, que significa en la orilla del tequesquite, se encontraba cerca de la orilla sur y que los dueños de la hacienda Vista Hermosa, para ahuyentar a sus moradores, dirigieron los acholes, las aguas sobrantes de los campos de cultivo, lo que hizo elevar el nivel de las aguas. Actualmente existe una boya que señala el lugar preciso donde se encuentra la antigua iglesia del pueblo.Un arcaico propietario de esta hacienda, don Miguel Mosso, trató de aclimatar en la laguna una especia de toros anfibios llamados carabaos, que trajo de las islas filipinas, los cuales fueron acabados por los vecinos para aprovechar su carne y su grasa. Actualmente, en el lago de Tequesquitengo hay una gran variedad de flora y fauna, destacando una variedad de tilapia y una especie de langosta, además de garzas blancas, patos y pequeños mamíferos como conejos y tlacuaches.El lago es uno de los mejores atractivos para quienes gustan de la emoción de los deportes acuáticos, como el esquí, el paseo en lancha, la natación y desde luego el buceo, que puede practicarse en la parte central del lago, donde se pueden observar los restos de la iglesia del poblado que permanecen debajo del agua. Cada tercer jueves de mayo se celebra la fiesta del Señor de la Ascensión, con un paseo solemne en lancha alrededor del lago, con la participación de los habitantes del pueblo, quienes adornan sus lanchas de manera vistosa. Posteriormente se hace una misa para luego iniciar diversos eventos culturales, bailes tradicionales y muestra de artesanías de la región.Los eventos deportivos más representativos del lago son la Nauticopa, carrera de lanchas de la fórmula T-1 realizada en octubre; la carrera atlética que se realiza en el mes de diciembre y la práctica del ciclismo, con la terminación de la primera etapa de la ciclopista, la cual tiene una extensión de 2 kilómetros. Cerca del lago se localizan tres aeropistas, donde funcionan clubes de paracaidismo, avionetas y aviones denominados ultraligeros.El Fideicomiso Lago de Tequesquitengo funciona como un organismo público descentralizado que se encarga de realizar acciones de promoción para el lago, regularización de la tenencia de la tierra entre los ejidos y de fomento para la creación de empresas turísticas, pues la actividad preponderante de los habitantes es ahora la prestación de servicios, para lo cual se han organizado varios cursos de capacitación.Cabe señalar que actualmente se han abierto dos playas ejidales, en donde los visitantes pueden disfrutar de un día de campo a precios accesibles. En el lago existen actualmente ocho hoteles, 13 restaurantes, seis pensiones para lanchas y varios clubes de playa, además de una capitanía de puerto donde se tiene un registro de todas las embarcaciones.Para este período vacacional de semana mayor se espera una afluencia de 24 mil visitantes, comenta Víctor González Franzoni, director del fideicomiso, cifra que se espera rebasar pues consideró a Tequesquitengo como un destino turístico de calidad, al tiempo de invitar a los morelenses para visitar el también llamado mar de Morelos.